La
terapia Gestalt
Fue desarrollada después de la Segunda
Guerra Mundial por Fritz Perls y su esposa Laura. Fritz consideró que la raíz
de los trastornos psicológicos podía estar en la incapacidad de las personas de
integrar exitosa y acertadamente las partes de su personalidad en un todo
saludable.
El Enfoque Gestáltico (EG) es un enfoque holístico;
es decir, que percibe a los objetos, y en especial a los seres vivos, como
totalidades. En Gestalt decimos que "el todo es más que la suma de las
partes". Todo existe y adquiere un significado al interior de un contexto
específico; nada existe por sí solo, aislado.
El EG es esencialmente una forma de vivir
la vida con los pies bien puestos en la tierra. No pretende encaminar al
individuo por el camino de lo esotérico o de la iluminación. Es un modo de
llegar a estar en este mundo en forma plena, libre y abierta; aceptando y
responsabilizándonos por lo que somos, sin usar más recursos que apreciar lo
obvio, lo que es.
El EG es en sí mismo un estilo de vida; de
allí que sea más adecuado denominarlo "enfoque", que es un término
más amplio, en lugar de "terapia", que restringe sus posibilidades de
aplicación a lo clínico.
BASES
DE LA GESTALT.-
El EG
ha recibido la influencia de las siguientes corrientes:
v El
psicoanálisis de Freud, retomando y reformulando su teoría de los mecanismos de
defensa y el trabajo con los sueños.
v La
filosofía existencial, de la que rescata la confianza en las potencialidades
inherentes al individuo, el respeto a la persona y la responsabilidad.
v La
fenomenología, de la que toma su apego por lo obvio, por la experiencia inmediata
y por la toma de conciencia (insight).
v La
psicología de la Gestalt, con su teoría de la percepción (figura-fondo, Ley de
la buena forma, etc.).
v Las
religiones orientales, y en especial el Budismo Zen.
v El
psicodrama, de J.L. Moreno, del que adopta la idea de dramatizar las
experiencias y los sueños.
v La
teoría de la coraza muscular de W. Reich.
v La
teoría de la Indiferencia Creativa, de Sigmund Friedlander, de la que extrae su
teoría de las polaridades.
EL
DARSE CUENTA (Awareness).-
Este es el concepto clave sobre el que se
asienta el EG. En pocas palabras darse cuenta es entrar en contacto, natural,
espontáneo, en el aquí y ahora, con lo que uno es, siente y percibe. Es un
concepto semejante en algo al de insight, aunque es más amplio; una especie de cadena
organizada de insight.
Existen tres Zonas del Darse Cuenta:
1. El
darse cuenta del mundo exterior: Esto es, contacto sensorial
con objetos y eventos que se encuentran fuera de uno en el presente; lo que en
este momento veo, toco, palpo, degusto o huelo. Es lo obvio, lo que se presenta
de por sí ante nosotros. En este momento veo mi lapicero deslizándose sobre el
papel formando una palabra, escucho el ruido de los carros pasando por la
avenida, huelo el perfume de una joven que pasa por mi lado, siento el sabor de
una fruta en mi boca.
2. El
darse cuenta del mundo interior: Es el contacto sensorial
actual con eventos internos, con lo que ocurre sobre y debajo de nuestra piel.
Tensiones musculares, movimientos, sensaciones molestas, escozores, temblores,
sudoración, respiración, etc. En este momento siento la presión de mi dedo
índice, mayor y pulgar sobre mi lapicero al escribir; siento que deposito el
peso de mi cuerpo sobre mi codo izquierdo; siento mi corazón late, que mi
respiración se agita, etc.
3. El darse cuenta de fantasía Intermedia
Esto incluye toda la actividad mental que transcurre más allá del presente:
todo el explicar, imaginar, adivinar, pensar, planificar, recordar el pasado,
anticiparse al futuro, etc. En este momento me pregunto qué haré mañana en la mañana,
¿será algo útil, bueno? En Gestalt todo esto es irrealidad, fantasía. Aún no es
el día de mañana, y no puedo saber y decir NADA acerca de ello. Todo está en mi
imaginación; es pura y simple especulación, y lo más saludable es asumirlo como
tal.
TÉCNICAS
DE LA GESTALT.
En la
Terapia Guestáltica se trabaja con tres clases de técnicas básicamente:
1) Las
T. Supresivas;
2) Las
T. Expresivas; y
3) Las
T. Integrativas.
1. Técnicas
Supresivas: Pretenden básicamente evitar o suprimir los
intentos de evasión del cliente del aquí/ahora y de su experiencia; es decir,
se busca con ello que el sujeto experimente lo que no quiere o lo oculto a fin
de facilitar su darse cuenta.
Entre
las Principales Supresivas tenemos:
v Experimentar
la nada o el vacío, tratando de que el "vacío estéril se convierta en
vacío fértil"; no huir del sentimiento de vacío, integrarlo al sí mismo,
vivirlo y ver que surge de él.
v Evitar
"hablar acerca de", como una forma de escapar a lo que es. El hablar
debe sustituirse por el vivenciar.
v Detectar
los "deberías" y antes que suprimirlos es mejor tratar de determinar
qué puede haber detrás de ellos. Los "deberías" al igual que el
"hablar acerca de" son forma de no ver lo que se es detectar las
diversas formas de manipulación y los juegos o roles "como si" que se
desempeñan en terapia. También, antes que suprimirlos es mejor vivenciarlos,
hacer que el sujeto se de cuenta de ellos y del rol que juegan en su vida.
Entre las principales formas de manipular podemos hallar: las preguntas, las
respuestas, pedir permiso y las demandas.
2. Técnicas
Expresivas: Se busca que el sujeto exteriorice lo interno,
que se dé cuenta de cosas que posiblemente llevó en sí toda su vida pero que no
percibía.
Se
buscan tres cosas básicamente:
v Expresar
lo no expresado.
v Terminar
o completar la expresión.
v Buscar
la dirección y hacer la expresión directa.
v Expresar
lo no expresado:
1.
Maximizar la expresión, dándole al sujeto un contexto no estructurado para que
se confronte consigo mismo y se haga responsable de lo que es. Se pueden
trabajar con inducciones imaginarias de situaciones desconocidas o raras, para
que aflores temores, situaciones inconclusas. También se puede minimizar la
acción no-expresiva.
2.
Pedir al cliente que exprese lo que está sintiendo.
3.
Hacer la ronda, que el sujeto exprese lo que quiera a cada miembro del grupo o
se le da una frase para que la repita a cada uno y experimente lo que siente.
Terminar
o completar la expresión:
Aquí se busca detectar las situaciones
inconclusas, las cosas que no se dijeron pero pudieron decirse o hacerse y que
ahora pesan en la vida del cliente. Una de las técnicas más conocidas es la
"silla vacía", es decir, trabajar imaginariamente los problemas que
el sujeto tiene con personas vivas o muertas utilizando el juego de roles.
También se pueden utilizar inducciones imaginarias para reconstruir la
situación y vivirla nuevamente de manera más sana, expresando y experimentando
todo lo que se evitó la primera vez.
-
Buscar la dirección y hacer la expresión directa:
1.
Repetición: La intención de esta técnica es buscar que el
sujeto se percate de alguna acción o frase que pudiera ser de importancia y que
se dé cuenta de su significado. Ejemplos: "repite es frase
nuevamente", "haz otra vez ese gesto", etc.
2.
Exageración y desarrollo: Es ir más allá de la simple
repetición, tratando de que el sujeto ponga más énfasis en lo que dice o hace, cargándolo
emocionalmente e incrementando su significado hasta percatarse de él. También,
a partir de una repetición simple el sujeto puede continuar desarrollando su
expresión con otras cosas para facilitar el darse cuenta.
3. Traducir:
Consiste en llevar al plano verbal alguna conducta no verbal, expresar con
palabras lo que se hace. "Qué quiere decir tu mano", "Si tu
nariz hablara que diría", "Deja hablar a tus genitales".
4.
Actuación e identificación: Es lo
contrario a traducir. Se busca que el sujeto "actúe" sus
sentimientos, emociones, pensamientos y fantasías; que las lleve a la práctica
para que se identifique con ellas y las integre a su personalidad. Es muy útil
en el trabajo de sueños.
5. Técnicas Integrativas: Se
busca con estas técnicas que el sujeto incorpore o reintegre a su personalidad
sus partes alienadas, sus hoyos. Aunque las técnicas sorpresivas y expresivas
son también integrativas de algún modo, aquí se hace más énfasis en la
incorporación de la experiencia.
a. El encuentro intrapersonal: Consiste
en que el sujeto mantenga un diálogo explícito, vivo, con las diversas partes
de su ser; entre los diversos suyos intra-psíquicos. Por ejemplo entre el
"yo debería" y el "yo quiero", su lado femenino con el
masculino, su lado pasivo con el activo, el risueño y el serio, el perro de
arriba con el perro de abajo, etc. Se puede utilizar como técnica la
"silla vacía" intercambiando los roles hasta integrar ambas partes en
conflicto.
b.
Asimilación de proyecciones: Se
busca aquí que el sujeto reconozca como propias las proyecciones que emite.
Para ello se le puede pedir que él haga de cuenta que vive lo proyectado, que
experimente su proyección como si fuera realmente suya. Ejemplo:
P: "Mi madre me odia".
T: "Imagina que eres tú quien odia a
tu madre; cómo te sientes con ese sentimiento? ¿Honestamente, puedes reconocer
que ese sentimiento es tuyo realmente?".
Es importante recordar que estos
procedimientos o técnicas son sólo un apoyo para lograr los objetivos terapéuticos,
pero que no constituyen en sí la Terapia Gestalt. Lo importante, lo realmente
terapéutico, es la "actitud guestá-tica" que se adopte, el
reconocimiento de la importancia de proceso, y el respeto por el ritmo
individual del cliente. No empujar el río, dejarse. Tampoco aplicar las
técnicas estereotipadamente, son asimilar la filosofía implícita en el Enfoque
Gestalt.