martes, 16 de junio de 2015


Psicología social




La psicología social es el estudio científico de cómo los pensamientos, sentimientos y comportamientos de las personas son influidos por la presencia real, imaginada o implícita de otras personas.1 Junto con la psicología clínica, la educativa y la organizacional, la psicología social es una de las cuatro grandes ramas de la psicología, así como una de las ramas clásicas de la sociología. Sus orígenes se remontan a 1879 con la aparición de la Völkerpsychologie o Psicología de los pueblos, desarrollada por Wilhelm Wundt y que actualmente es una de las especialidades de estudio, focalizando el individuo en la sociedad y la incidencia de esta en el individuo ya que lo humano y lo social están estrechamente relacionados y se complementan mutuamente.
Según la definición anterior, científico refiere al método empírico de investigación. Los términos pensamientos, sentimientos y comportamientos incluyen todas las variables psicológicas que se pueden medir en un ser humano. La afirmación de que otras personas pueden ser imaginadas o implícitas sugiere que, de manera indefectible, estamos influenciados socialmente, incluso cuando:
a) no hay otros individuos presentes -como cuando vemos la televisión
b) seguimos normas culturales internalizadas.




La psicología social es definida también como La ciencia que estudia los fenómenos sociales e intenta descubrir las leyes por las que se rige la convivencia. Investiga las organizaciones sociales y trata de establecer los patrones de comportamientos de los individuos en los grupos, los roles que desempeñan y todas las situaciones que influyen en su conducta. Todo grupo social adopta una forma de organización dictaminada por la misma sociedad con el fin de resolver más eficazmente los problemas de la subsistencia.
Típicamente, los psicólogos sociales explican el comportamiento humano como resultado de la interacción de estados mentales y situaciones sociales inmediatas. En la heurística de Kurt Lewin, el comportamiento puede ser visto como una función de la persona y el medioambiente, C=f(P, M). En general, los psicólogos sociales tienen una preferencia por los hallazgos empíricos basados en laboratorios. Sus teorías tienen tendencia a ser específicas y enfocadas, en vez de globales y generales.



La psicología social es un dominio interdisciplinario que salva el espacio entre la psicología y la sociología. Durante los años inmediatamente posteriores a la Segunda Guerra Mundial, había una colaboración frecuente entre psicólogos y sociólogos.2 Sin embargo, las dos disciplinas han virado hacia una actitud cada vez más especializada, aislándose la una de la otra. En años recientes, los sociólogos se han centrado en macro variables (por ejemplo, la estructura social), yendo hacia una extensión mucho más grande. No obstante, los enfoques sociológicos de la psicología social se convierten en una contraparte importante a la investigación psicológica en el área.
Además de la ruptura entre la psicología y la sociología, ha habido una diferencia bastante menos pronunciada en el énfasis, entre los psicólogos sociales estadounidenses y los psicólogos sociales europeos. Haciendo una amplia generalización, se puede decir que, tradicionalmente, los investigadores estadounidenses se han centrado más en el individuo, mientras que los europeos han prestado más atención a los fenómenos a nivel de grupo.


Complejidad de la psicología social

La influencia de los estereotipos sobre las conductas de exclusión, tal como se analiza en los trabajos de Mullen y colaboradores, pone de manifiesto la actuación conjunta de varios procesos de distinta naturaleza que se entrecruzan entre sí. Algunos de ellos son individuales, tienen que ver con cogniciones (por ejemplo, la complejidad de los etnofaulismos) y con emociones (por ejemplo, su valencia), pero otros son estructurales; es decir, reflejan dimensiones permanentes y globales de la sociedad. Es lo que ocurre con los antecedentes de la complejidad de los estereotipos.
Valga como ejemplo de estos procesos estructurales el grado en que la sociedad de acogida considera extranjeros a los miembros de un grupo étnico de inmigrantes. Al ser los Estados Unidos de Norteamérica un país con predominancia de lo anglosajón, a un inmigrante inglés, por ser también anglosajón, se le aplicarán etnofaulismos muy distintos a los que se aplican, pongamos por caso, a un inmigrante griego. Es decir, un inmigrante inglés es considerado, por así decir, menos “extranjero” que un griego y, por lo tanto, en comparación con un inmigrante griego, al inglés se le aplican etnofaulismos más complejos y más positivos. La clave está en el carácter compartido entre estadounidenses e ingleses de un aspecto estructural: su pertenencia al mundo anglosajón.

Si se consideran ahora las conductas de exclusión (las consecuencias de los etnofaulismos), se apreciará que también ellas ponen en marcha procesos de carácter estructural. En efecto, ser acogido como inmigrante en un país trae consigo una serie de implicaciones que no afectan sólo a cogniciones, emociones y conductas individuales, sino a regulaciones institucionales, como nuevas leyes que cumplir y nuevas normas en el trato con los demás en diversos ámbitos, desde el laboral al familiar, sin olvidar el religioso, el tiempo de ocio y el lugar donde vivir, entre otros. Todo ello se intensifica con el proceso de “naturalización”, que hace que la persona pase a ser ciudadano del país de acogida con un conjunto explícito de derechos y obligaciones diferentes a las de su país de origen.
En resumen, la investigación de Mullen y colaboradores es una prueba de que los procesos implicados en la influencia de los estereotipos sobre las conductas de exclusión son muy variados y de distinta naturaleza. Esto es también característico de los procesos que estudia la Psicología social y se aprecia en un análisis detenido del contenido del Cuadro
 El resto del presente apartado examina este asunto con mayor detalle, a través de un análisis de dos de las teorías de mayor influencia en la Psicología social: la Teoría de la identidad social y la Teoría de la justificación del sistema.


Objeto de la Psicología Social


Psicología social (psique, es: mente logus, ou: tratado, razón) El objeto de estudio de la psicología social son las relaciones sociales. El interaccionismo simbólico es una de las teorías más influyentes y características de esta disciplina. Su antecesor, George Herbert Mead, estudió los gestos, el lenguaje y la conducta, como productos de las relaciones que sostienen las personas, en primera instancia, cuando están cara a cara.6

Evidentemente existen en la sociedad organizaciones configuradas en torno a los aspectos socioculturales, derivados de la interacción de individuos; luego no es difícil asimilar la existencia de una conciencia colectiva que nos permita comprender dichas configuraciones.

La Psicología social asume como supuesto la existencia independiente y observable de procesos psicológicos sociales de diferente orden al de los procesos psicológicos del individuo pero de la misma naturaleza, lo cual nos ayuda a comprender cómo nos comportamos en grupos, también abarca lo que son las actitudes de cada persona ante su forma de reaccionar o pensar en el medio social..

A continuación los modelos teóricos de la psicología social. 
TEORIA DE LA GESTALT


Es un enfoque holístico; es decir que percibe a los objetos, sistemas y en especial a los seres vivos como totalidades. Es decir “El todo es más que la suma de sus partes”, todo existe y tiene significado como parte de un contexto sin poder existir de manera aislada.
La realidad es un todo determinada por el “Aquí” y “Ahora”, aunque el presente se compone de un pasado y espera un futuro, estos son irreales; meras construcciones de la conciencia interior, exterior y mental de los sentidos. Por ello no se debe preguntar el ¿Por qué?, porque esto nos arrojara al pasado o al futuro, las cuales son inexistentes o simplemente nos introduce en el mundo de fantasía, como los dichosos discursos presidenciales, gubernamentales que son el resultado del porqué de los proyectos, pero todo esto tiene un propósito sacarnos de la realidad del problema. Más bien debemos preguntarnos el “como” (la función estructural totalitaria).
Como parte de esta teoría el desarrollo humano es un todo que no existe en un pasado fallido o en una planeación futura de un discurso irreal. Desde esta perspectiva el desarrollo humano debe ser holístico, se debe planear un desarrollo humano totalitario (mundial). Sin embargo el contexto internacional cuenta con particularidades propias como la cultura, por ejemplo no es la misma cultura en México que en la India, si bien es importante tener conciencia de todo no debemos de olvidar que el cambio de una parte simboliza el cambio del todo.
Con todo lo anterior la “Gestalt” no nos permite mirar al desarrollo humano en sus particularidades como lo son la política, la economía, la espiritualidad, la administración, la educación; sino en un todo, esto es lo que empobrece a esta teoría.

La Psicología de la Gestalt es una corriente de la psicología moderna, surgida en Alemania a principios del siglo XX, y cuyos exponentes más reconocidos han sido los teóricos Max Wertheimer, Wolfgang Köhler, Kurt Koffka y Kurt Lewin.
El término Gestalt proviene del alemán y fue introducido por primera vez por Christian von Ehrenfels No tiene una traducción única, aunque se lo entiende generalmente como forma. Sin embargo, también podría traducirse como figura, configuración e, incluso, estructura o creación.
La Teoría de la Gestalt se refiere a como el ser humano percibe las figuras, palabras o representaciones que dan a entender un mensaje, esto significa como se percibe en la mente los objetos conocidos en la vida diaria.
El ser humano utiliza la percepción, en el proceso del aprendizaje. Los psicólogos de la Gestalt dicen que buen parte del aprendizaje humano es por insight, esto significa que el paso de la ignorancia al conocimiento ocurre con rapidez, “de repente”. La mente configura, a través de ciertas leyes, los elementos que llegan a ella a través de los canales sensoriales (percepción) o de la memoria (pensamiento, inteligencia y resolución de problemas). En nuestra experiencia del medio ambiente, esta configuración tiene un carácter primario por sobre los elementos que la conforman, y la suma de estos últimos por sí solos no podría llevarnos, por tanto, a la comprensión del funcionamiento mental. Este planteamiento se ilustra con el axioma el todo es más que la suma de las partes, con el cual se ha identificado con mayor frecuencia a esta escuela psicológica.
Es por ello que podemos terminar de formar en nuestras mentes las figuras que aún no estamos viendo de manera completa. Imaginemos que con solo ver una parte de una pelota, nuestra experiencia previa nos hace saber que es redonda aunque no la estemos viendo. Podemos afirmar, como dice Bruno Munari: “Cada uno ve lo que sabe”.
Los gestalistas en este terreno permitieron descubrir las siguientes leyes de la percepción:

*Proximidad/ agrupar
*Igualdad o equivalencia
*Cerramiento
*Experiencia y comparación
*Fondo Figura
*Continuidad
*Prognaz o “buena forma”
*Clausura de objeto, cerramiento.



Así mismo cada una consiste en:
Figura y fondo pueden funcionar como fondo y figura respectivamente. En este caso se habla de una relación reversible o ambigua.
Relación figura-fondo definida: La imagen puede destacarse claramente del fondo.
Relación figura-fondo indefinida: También conocido como “mìmesis”. En este caso se produce una confusión que no permite diferenciar claramente la figura del fondo.
-Ley del Cierre: Nuestra mente añade los elementos faltantes para completar una figura.
-Ley de la Semejanza: Nuestra mente agrupa los elementos similares en una entidad. De este modo, dos elementos de forma similar rodeados de elementos cuyas formas difieren a éstos, serán asociados. La semejanza puede darse a través de las variantes de la forma, el tamaño, el color, la textura, el tono de los elementos y la dirección de las formas.
-Ley de la Proximidad: El agrupamiento parcial o secuencial de elementos por nuestra mente.
-Ley de la Simetría: Las imágenes simétricas son percibidas como iguales, como un solo elemento, en la distancia. Aun sabiendo que la mitad de nuestro cuerpo no es exactamente igual a la otra mitad, al dividirlo, percibiremos dos partes simétricas ya que responden a un mismo patrón de formas.
-Ley de la Continuidad: La mente continúa un patrón, aun después de que el mismo desaparezca.
-Ley del Cerramiento: Nuestra mente tiende a completar las zonas faltantes de una forma.
-Ley de Pregnancia: Cuando una figura es pregnante, por su forma, tamaño, color - valor, direccionalidad, movimiento, textura, nos referimos al grado en que una figura es percibida con mayor rapidez por el ojo humano. Aquello que capte nuestra atención en primer orden, tendrá mayor pregnancia que el resto de las formas de la composición. Suponiendo en el caso de la pregnancia por tamaño, se colocan 5 objetos sobre la mesa, cuatro de ellos pequeños y uno de ellos enorme en comparación a éstos. Cuando nuestra vista se dirija hacia estos, hemos de ver como en primer instancia al más pregnante, en este caso, el único de gran tamaño.
Todas esta leyes responden al modo de percibir del ojo humano, a través del cual el cerebro decodifica la información visual. Constituye el modo en que percibimos constantemente. Actúa sobre nosotros, y nosotros también actuamos en relación a ello.
En cuanto al manejo de códigos visuales, tanto para su estudio como para su empleo en la creación de mensajes comunicacionales, es importante tener en cuenta las relaciones entre el campo y la figura, dónde además de las características formales la ubicación de los elementos también es un generador de sensaciones e interpretando por nuestro cerebro.
De este modo, si delimitamos una imagen a través de un encuadre, ubicando uno de sus elementos en la parte central del campo, este dará sensación de quietud y atraerá al espectador. Sin embargo, si el mismo objeto es ubicado en la parte superior central del campo, la sensación generada será de tensión.
Los gestalistas en este terreno permitieron descubrir las siguientes leyes de la percepción, la resolución de problemas y aprendizaje en el ser humano y en menor grado en los animales.


LEYES ENTRE LAS PRINCIPALES LEYES ANUNCIADAS POR LA DOCTRINA GESTALT.
Se encuentran la ley de la semejanza (que postula que la mente se encarga de realizar agrupaciones de elementos según su similaridad), la ley de la pregnancia (la experiencia resultante de la percepción siempre tiende a adquirir la forma de mayor simpleza), la ley de la proximidad (la reunión de elementos se concreta según la distancia) y la ley del cierre (cuando falta algún elemento, la mente se encarga de añadirlo para, de esta forma, lograr obtener una figura completa).
No obstante, también hay que dejar patente que junto a dichos principios existen otros tales como el de simetría que establece que las imágenes que están dotadas con esta seña de identidad se contemplan como idénticas en la distancia, o el de experiencia es el que determina que nuestro sistema nervioso se va formando en función del mundo exterior que nos rodea, se deja influir por el mismo.

EXPLICACIÓN DE LAS IMAGENES
En la foto en color rojo, está representado por una pareja donde según las experiencias de cada individuo,  se puede entender o percibir de diferente manera como amor, lujuria, sexo, enojo etcétera.
En la foto del espejo se muestra como una persona al verse, puede   tener percepciones distintas.
La foto de los números y de las manos, representa claramente la ley de la Gestalt “el todo es más que la suma de las partes”, con esto nos referimos a que agrupando las ideas, se llegará más fácil al mensaje u objetivo deseado.
El ojo  es la representación de los sentidos, ya que percibimos a través de ellos.

Las demás imágenes ejemplifican la percepción, de cómo una imagen puede tener diferentes sentidos o significados, dependiendo de la experiencia del individuo, siendo solo un mensaje.
La terapia Gestalt



Fue desarrollada después de la Segunda Guerra Mundial por Fritz Perls y su esposa Laura. Fritz consideró que la raíz de los trastornos psicológicos podía estar en la incapacidad de las personas de integrar exitosa y acertadamente las partes de su personalidad en un todo saludable.
El Enfoque Gestáltico (EG) es un enfoque holístico; es decir, que percibe a los objetos, y en especial a los seres vivos, como totalidades. En Gestalt decimos que "el todo es más que la suma de las partes". Todo existe y adquiere un significado al interior de un contexto específico; nada existe por sí solo, aislado.
El EG es esencialmente una forma de vivir la vida con los pies bien puestos en la tierra. No pretende encaminar al individuo por el camino de lo esotérico o de la iluminación. Es un modo de llegar a estar en este mundo en forma plena, libre y abierta; aceptando y responsabilizándonos por lo que somos, sin usar más recursos que apreciar lo obvio, lo que es.
El EG es en sí mismo un estilo de vida; de allí que sea más adecuado denominarlo "enfoque", que es un término más amplio, en lugar de "terapia", que restringe sus posibilidades de aplicación a lo clínico.



BASES DE LA GESTALT.-

El EG ha recibido la influencia de las siguientes corrientes:
v  El psicoanálisis de Freud, retomando y reformulando su teoría de los mecanismos de defensa y el trabajo con los sueños.
v  La filosofía existencial, de la que rescata la confianza en las potencialidades inherentes al individuo, el respeto a la persona y la responsabilidad.
v  La fenomenología, de la que toma su apego por lo obvio, por la experiencia inmediata y por la toma de conciencia (insight).
v  La psicología de la Gestalt, con su teoría de la percepción (figura-fondo, Ley de la buena forma, etc.).
v  Las religiones orientales, y en especial el Budismo Zen.
v  El psicodrama, de J.L. Moreno, del que adopta la idea de dramatizar las experiencias y los sueños.
v  La teoría de la coraza muscular de W. Reich.
v  La teoría de la Indiferencia Creativa, de Sigmund Friedlander, de la que extrae su teoría de las polaridades.

EL DARSE CUENTA (Awareness).-
Este es el concepto clave sobre el que se asienta el EG. En pocas palabras darse cuenta es entrar en contacto, natural, espontáneo, en el aquí y ahora, con lo que uno es, siente y percibe. Es un concepto semejante en algo al de insight, aunque es más amplio; una especie de cadena organizada de insight.
Existen tres Zonas del Darse Cuenta:

1. El darse cuenta del mundo exterior: Esto es, contacto sensorial con objetos y eventos que se encuentran fuera de uno en el presente; lo que en este momento veo, toco, palpo, degusto o huelo. Es lo obvio, lo que se presenta de por sí ante nosotros. En este momento veo mi lapicero deslizándose sobre el papel formando una palabra, escucho el ruido de los carros pasando por la avenida, huelo el perfume de una joven que pasa por mi lado, siento el sabor de una fruta en mi boca.
2. El darse cuenta del mundo interior: Es el contacto sensorial actual con eventos internos, con lo que ocurre sobre y debajo de nuestra piel. Tensiones musculares, movimientos, sensaciones molestas, escozores, temblores, sudoración, respiración, etc. En este momento siento la presión de mi dedo índice, mayor y pulgar sobre mi lapicero al escribir; siento que deposito el peso de mi cuerpo sobre mi codo izquierdo; siento mi corazón late, que mi respiración se agita, etc.
3. El darse cuenta de fantasía Intermedia Esto incluye toda la actividad mental que transcurre más allá del presente: todo el explicar, imaginar, adivinar, pensar, planificar, recordar el pasado, anticiparse al futuro, etc. En este momento me pregunto qué haré mañana en la mañana, ¿será algo útil, bueno? En Gestalt todo esto es irrealidad, fantasía. Aún no es el día de mañana, y no puedo saber y decir NADA acerca de ello. Todo está en mi imaginación; es pura y simple especulación, y lo más saludable es asumirlo como tal.

TÉCNICAS DE LA GESTALT.
En la Terapia Guestáltica se trabaja con tres clases de técnicas básicamente:
1) Las T. Supresivas;
2) Las T. Expresivas; y
3) Las T. Integrativas.

1. Técnicas Supresivas: Pretenden básicamente evitar o suprimir los intentos de evasión del cliente del aquí/ahora y de su experiencia; es decir, se busca con ello que el sujeto experimente lo que no quiere o lo oculto a fin de facilitar su darse cuenta.
Entre las Principales Supresivas tenemos:
v  Experimentar la nada o el vacío, tratando de que el "vacío estéril se convierta en vacío fértil"; no huir del sentimiento de vacío, integrarlo al sí mismo, vivirlo y ver que surge de él.
v  Evitar "hablar acerca de", como una forma de escapar a lo que es. El hablar debe sustituirse por el vivenciar.
v  Detectar los "deberías" y antes que suprimirlos es mejor tratar de determinar qué puede haber detrás de ellos. Los "deberías" al igual que el "hablar acerca de" son forma de no ver lo que se es detectar las diversas formas de manipulación y los juegos o roles "como si" que se desempeñan en terapia. También, antes que suprimirlos es mejor vivenciarlos, hacer que el sujeto se de cuenta de ellos y del rol que juegan en su vida. Entre las principales formas de manipular podemos hallar: las preguntas, las respuestas, pedir permiso y las demandas.

2. Técnicas Expresivas: Se busca que el sujeto exteriorice lo interno, que se dé cuenta de cosas que posiblemente llevó en sí toda su vida pero que no percibía.

Se buscan tres cosas básicamente:

v  Expresar lo no expresado.
v  Terminar o completar la expresión.
v  Buscar la dirección y hacer la expresión directa.
v  Expresar lo no expresado:

1. Maximizar la expresión, dándole al sujeto un contexto no estructurado para que se confronte consigo mismo y se haga responsable de lo que es. Se pueden trabajar con inducciones imaginarias de situaciones desconocidas o raras, para que aflores temores, situaciones inconclusas. También se puede minimizar la acción no-expresiva.
2. Pedir al cliente que exprese lo que está sintiendo.
3. Hacer la ronda, que el sujeto exprese lo que quiera a cada miembro del grupo o se le da una frase para que la repita a cada uno y experimente lo que siente.
Terminar o completar la expresión:
Aquí se busca detectar las situaciones inconclusas, las cosas que no se dijeron pero pudieron decirse o hacerse y que ahora pesan en la vida del cliente. Una de las técnicas más conocidas es la "silla vacía", es decir, trabajar imaginariamente los problemas que el sujeto tiene con personas vivas o muertas utilizando el juego de roles. También se pueden utilizar inducciones imaginarias para reconstruir la situación y vivirla nuevamente de manera más sana, expresando y experimentando todo lo que se evitó la primera vez.

- Buscar la dirección y hacer la expresión directa:

1. Repetición: La intención de esta técnica es buscar que el sujeto se percate de alguna acción o frase que pudiera ser de importancia y que se dé cuenta de su significado. Ejemplos: "repite es frase nuevamente", "haz otra vez ese gesto", etc.
2. Exageración y desarrollo: Es ir más allá de la simple repetición, tratando de que el sujeto ponga más énfasis en lo que dice o hace, cargándolo emocionalmente e incrementando su significado hasta percatarse de él. También, a partir de una repetición simple el sujeto puede continuar desarrollando su expresión con otras cosas para facilitar el darse cuenta.
3. Traducir: Consiste en llevar al plano verbal alguna conducta no verbal, expresar con palabras lo que se hace. "Qué quiere decir tu mano", "Si tu nariz hablara que diría", "Deja hablar a tus genitales".
4. Actuación e identificación: Es lo contrario a traducir. Se busca que el sujeto "actúe" sus sentimientos, emociones, pensamientos y fantasías; que las lleve a la práctica para que se identifique con ellas y las integre a su personalidad. Es muy útil en el trabajo de sueños.

5. Técnicas Integrativas: Se busca con estas técnicas que el sujeto incorpore o reintegre a su personalidad sus partes alienadas, sus hoyos. Aunque las técnicas sorpresivas y expresivas son también integrativas de algún modo, aquí se hace más énfasis en la incorporación de la experiencia.

a. El encuentro intrapersonal: Consiste en que el sujeto mantenga un diálogo explícito, vivo, con las diversas partes de su ser; entre los diversos suyos intra-psíquicos. Por ejemplo entre el "yo debería" y el "yo quiero", su lado femenino con el masculino, su lado pasivo con el activo, el risueño y el serio, el perro de arriba con el perro de abajo, etc. Se puede utilizar como técnica la "silla vacía" intercambiando los roles hasta integrar ambas partes en conflicto.
b. Asimilación de proyecciones: Se busca aquí que el sujeto reconozca como propias las proyecciones que emite. Para ello se le puede pedir que él haga de cuenta que vive lo proyectado, que experimente su proyección como si fuera realmente suya. Ejemplo:
P: "Mi madre me odia".
T: "Imagina que eres tú quien odia a tu madre; cómo te sientes con ese sentimiento? ¿Honestamente, puedes reconocer que ese sentimiento es tuyo realmente?".

Es importante recordar que estos procedimientos o técnicas son sólo un apoyo para lograr los objetivos terapéuticos, pero que no constituyen en sí la Terapia Gestalt. Lo importante, lo realmente terapéutico, es la "actitud guestá-tica" que se adopte, el reconocimiento de la importancia de proceso, y el respeto por el ritmo individual del cliente. No empujar el río, dejarse. Tampoco aplicar las técnicas estereotipadamente, son asimilar la filosofía implícita en el Enfoque Gestalt.

LA TEORIA DEL CAMPO


La orientación teórica del campo está estrechamente relacionada y comparte muchos principios con la orientación gestáltica. Esto no es sorprendente si se considera que su principal exponente, Kurt Lewin, recibió su formación de los fundadores del movimiento gestáltico en Alemania. Sin embargo, la orientación gestáltica estaba interesada primariamente en los fenómenos perceptivos, mientras que Lewin desarrolló un fuerte interés en los temas de la personalidad y la psicología social, llegando a considerar que el enfoque gestáltico era insuficiente para abordar adecuadamente estos nuevos problemas. Así, la teoría del campo de Lewin deriva de las ideas centrales de la Gestalt, pero procede en una dirección diferente que va más allá del enfoque que le sirvió de base.
CARACTERISTICAS GENERALES
La teoría del campo puede ser caracterizada en términos de seis principales rasgos o atributos (Deutsch, 1954; Shaw & Costanzo, 1970):
1) El uso de un método constructivo: Lewin propone que la psicología debe cambiar desde el método clasificatorio, donde los objetos, personas y eventos son agrupados de acuerdo a similitudes, a un método constructivo o genético, donde ellos son agrupados de acuerdo a sus relaciones (la manera en que pueden ser derivados unos de otros). "El método clasificatorio usa elementos de abstracción, mientras que el método de construcción usa elementos de construcción. Los elementos de abstracción son objetos de la experiencia del científico; los elementos de construcción son sus ideas" (Shaw & Costanzo, 1970, p. 118).
2) Un enfoque dinámico: plantea la existencia de un conjunto de fuerzas psicológicas que subyacen el comportamiento de los individuos. Y, a diferencia de los enfoques tradicionales que destacan los aspectos estáticos de la conducta (rasgos de personalidad, historia pasada, etc.), para comprender la conducta en profundidad es necesario formular
constructos científicos que destaquen esas fuerzas subyacentes. El concepto de fuerza es así muy importante en la teoría del campo, como veremos con mayor detalle más adelante. El individuo es concebido como un sistema que tiende a mantener un equilibrio dinámico con su ambiente: sus componentes mantienen una relativa flexibilidad de interrelaciones, de modo que la variación en un aspecto del sistema puede inducir cambios compensatorios en otros aspectos, manteniendo así la integridad del sistema.
3) Un énfasis en procesos psicológicos: además de ser dinámico, el enfoque debe ser siempre psicológico. El comportamiento debe ser descrito en términos del campo psicológico tal como existe para el individuo en un momento dado o, en otros términos, la descripción de la situación debe ser subjetiva más que objetiva. Esto es, la situación debe ser descrita desde el punto de vista del individuo cuya conducta se analiza, más que desde el punto de vista del observador, por lo cual los constructos científicos deben representar conceptos psicológicos. 4) Análisis basado en la situación como un todo: en lugar de empezar con el análisis de los elementos aislados de la situación y luego intentar organizarlos en un sistema integrado, la teoría del campo comienza con una descripción de la situación como un todo. Después de la caracterización inicial de la situación global, es entonces posible examinar elementos específicos y las relaciones entre esos elementos. Esta proposición, que refleja muy claramente la influencia gestáltica, sería similar al enfoque de la física, donde se plantea que hay ciertas propiedades importantes en un campo (eléctrico, magnético, etc.) que constituyen una unidad y afectan a todos los elementos. El equivalente psicosocial de esas propiedades podrían ser conceptos como clima social o cohesión de grupo.
5) Una distinción entre aspectos sistemáticos e históricos: los eventos psicológicos deben ser explicados en términos de las propiedades del campo que existen en el momento en que ocurren los eventos. Por lo tanto, el enfoque debe ser sistemático más que histórico. Para Lewin, los eventos pasados sólo pueden tener una posición en las cadenas causales históricas cuya interacción crea la situación actual; ellos no pueden influenciar directamente los eventos presentes. En otras palabras, aún cuando un evento pasado puede crear una cierta condición que se extiende hasta el presente, sin embargo es la condición actual la que influye en el presente (Deutsch, 1954).
6) Una representación matemática de las situaciones psicológicas:
para una comprensión clara de las propiedades formales de los constructos científicos, el lenguaje del análisis científico debe ser lógicamente estricto y estar en correspondencia con un enfoque dinámico, psicológico y constructivo. Por esto los determinantes del comportamiento deberían ser representados en términos matemáticos, si la psicología intenta llegar a ser una disciplina rigurosa. Lewin rechaza la noción común de que la matemática no puede manejar datos cualitativos, sino que por el contrario, sostiene que ciertas formas de geometría, en especial la llamada topología, pueden ser muy útiles para representar la estructura de los eventos psicológicos.
En términos muy generales, la topología es una rama de la geometría que investiga las propiedades de las figuras que permanecen inalteradas bajo condiciones de transformación continua, entre ellas las relaciones cualitativas de conexión y posición. Aunque los conceptos topológicos de Lewin pueden ser algo rudimentarios desde el punto de vista de la rigurosidad matemática, su principal función sería que permiten determinar qué eventos son posibles o no son posibles en un determinado espacio o campo. Y desde aquí son necesarios otros conceptos dinámicos para determinar cuál de los eventos posibles ocurrirá realmente en una situación determinada (Deutsch, 1954).
A modo de síntesis de los rasgos anteriores, Shaw y Costanzo (1970) expresan que "la formulación de Lewin de la teoría del campo requiere una aplicación psicológica, dinámica, del método constructivo a los problemas psicológicos. La conducta debe ser vista como función de la situación como un todo y como existe en el momento para el individuo. La situación psicológica debe ser representada en los términos más precisos posibles, y esta tarea requiere una representación matemática" (p. 120).
CONSTRUCTOS PRINCIPALES
A pesar que el sistema teórico desarrollado por Lewin es especialmente complejo y amplio, lo que en parte se debe a que intenta abarcar tanto la conducta individual como la personalidad y la conducta social, es posible referirse brevemente a algunos de los conceptos centrales en sus proposiciones. Su concepto más importante es por supuesto el de campo, el cual en términos psicológicos es considerado como el espacio vital del individuo, de ahí que este último sea el primer concepto a delimitar.
Espacio vital
El espacio vital se refiere a la totalidad de factores coexistentes que determinan la conducta de un individuo en un determinado momento, y consiste en la persona y en el ambiente psicológico tal como existe para ella (de modo similar, el espacio vital de un grupo consistiría en el grupo y en el ambiente tal como existe para el grupo en el momento). Para Lewin, "la conducta y el desarrollo dependen del estado de la persona y de su ambiente, C= f(P,A). En esta ecuación, la persona (P) y su ambiente (A) deben considerarse como variables mutuamente dependientes. En otras palabras, para comprender o predecir la conducta, la persona y su ambiente han de considerarse como una constelación de factores interdependientes. Llamamos a la totalidad de estos factores el espacio vital (EV) de ese individuo y escribimos entonces C= f(P,A)= f(EV)" (citado en Blanco, 1995, p. 238). Junto con la definición del constructo, es conveniente considerar algunos aspectos generales referidos al concepto de espacio vital, tal vez el concepto más nuclear en la teoría de Lewin.
En primer lugar, el espacio vital incluye sólo aquellas cosas que tienen existencia para el individuo o grupo en el momento, y desde este punto de vista, una cosa existe sólo si tiene efectos demostrables. En este sentido es que se hablaba en el párrafo anterior de ambiente psicológico, es decir, aquél cuyas propiedades están determinadas no sólo por el ambiente objetivo sino también por las características de la persona. La tarea del científico, que como el lector percibirá no aparece nada de fácil, es entonces determinar específicamente qué cosas existen para el individuo o el grupo, y diseñar métodos de observación y medición adecuados para representar el espacio vital. Por lo tanto, un aspecto clave es qué cosas debieran ser incluidas en el espacio vital y cuáles deberían ser excluidas. Puede ser relativamente fácil decidir que algunas cosas deben ser incluidas, tales como las necesidades y metas del individuo, y que otras cosas debieran ser excluidas, tales como eventos que ocurren en lugares muy remotos y que son totalmente desconocidos para el individuo. Sin embargo, también existe una amplia zona de ambigüedad donde la decisión no es tan fácil, como por ejemplo eventos económicos y políticos en lugares remotos pero que pueden afectar la conducta del individuo, o aún ciertos estados inconscientes que podrían tener efectos en la conducta.


La teoría del campo más representativa es la realizada por Kurt Lewin, quien expresó: “Los enunciados básicos de una teoría del campo son: a) La conducta ha de deducirse de una totalidad de hechos coexistentes. b) Estos hechos coexistentes tienen el carácter de un «campo dinámico»; el estado de cada una de las partes del campo depende de todas las otras”.
El modelo emplea bastante matemática, siendo la relación básica la siguiente:
C = f (P,A)
C es la conducta de un individuo y es una función (f) de la situación total que incluye las condiciones del individuo (P) y las del ambiente (A)
La TEORIA DEL CAMPO ("Field Theory") es principalmente obra de uno de los creadores de la "Gestaltpsychologie", Kurt Lewin (1890-1947), psicólogo alemán emigrado a los EE.UU. cuando se produjo el advenimiento del nazismo. Fue profesor en Berlin y luego en varias universidades norteamericanas.
Según sus propias palabras, "...difícilmente cabe llamar teoría a la teoría del campo...más exacto es denominarla método...un método para analizar las relaciones causales y erigir construcciones científicas" (2).
Kurt Lewin parte de un enfoque gestaltista ortodoxo, tomando en consideración la situación total del individuo, su "espacio vital", que es psicológico, cercado por el entorno físico (con el que interactúa) y definido en términos de presente. Para armar su modelo (con un sentido más descriptivo y heurístico que explicativo) toma muchas ideas y elementos del lenguaje de la Geometría Topológica y del Análisis Vectorial, pero no los combina en una estructura matemática formal, sino que los usa libremente, de acuerdo a sus necesidades.
Lewin creó la noción de CAMPO PSICOLOGICO para explicar la interacción de las fuerzas que emanan del sujeto y las influencias sociales. El campo psicológico es una "totalidad dinámica" que manifiesta el estado relacional de una persona con su entorno social en un momento determinado. Incluye percepciones y motivaciones. Cada situación combina influencias que generan estados de tensión, los que provocan nuevos comportamientos, en procura de nuevos estados de equilibrio.
El campo psicológico es, pues, un asiento de fuerzas y tensiones que se forman, se modifican y se reequilibran contínuamente. Un hombre dinámico (por ejemplo, el líder de un grupo) puede, con sus propias fuerzas, reorganizar las influencias sociales de su campo psicológico. Otros hombres, más pasivos, pueden evidenciar tendencias adaptativas a las tensiones, en diversas modalidades (positivas o negativas) tales como el aprendizaje, la adaptación y la frustración.
Otra noción importante de Kurt Lewin (de indudable interés sociológico y politológico) es la noción de NIVEL DE ASPIRACION, o sea la posición futura que un hombre se siente capaz de alcanzar cuando va a emprender una nueva actividad. Resultan muy interesantes sus observaciones sobre las modificaciones que sufren esas aspiraciones sobre la marcha, a medida que se experimentan triunfos y fracasos, según las diversas configuraciones psicológicas
La psicología utiliza con frecuencia el concepto de campo y lo toma prestado de la física. Un campo, en física, es una zona del espacio en donde existen propiedades representadas por magnitudes físicas (temperaturas, fuerzas, etc.) a las cuales se les asocian entes matemáticos adecuados para su descripción.
Mientras que, en algunas teorías psicológicas, la relación entre estímulo y respuesta es simple, en otras es compleja, y requiere de un campo de variables necesario para su descripción.
Lewin afirma que se deben explicar las acciones del hombre a partir del hecho de que percibe caminos y medios particulares para descargar determinadas tensiones. Al individuo le atraen las actividades que ve como medios de liberar su tensión; para él, tienen valencia positiva, y experimenta una fuerza que lo impulsa a realizarlas. Otras actividades tienen el efecto opuesto: el individuo encuentra en ellas la posibilidad de aumentos de tensión; se dice que tienen valencia negativa y que generan fuerzas repulsivas.

Toda la conducta o, por lo menos, toda conducta intencional, es motivada; la impulsan tensiones, la mueven fuerzas, la dirigen valencias, y tiene metas.